Aunque para muchos sigue presente que China es un exportador de mercancías de menor cuantía y calidad, la realidad de las cifras muestra que la potencia asiática es hoy líder mundial en ventas de manufacturas de alta tecnología, superando a Estados Unidos.
Este cambio en el liderazgo del mercado de los productos tecnológicos, es presentado por la misma industria estadounidense como el resultado de un análisis sobre la reciente evolución del sector manufacturero, realizado por la Alianza para la Productividad y la Innovación, concebida por la Asociación Nacional de la Industria Manufacturera.
El análisis señala que a lo largo de la última década China superó en casi todos los sectores de alta tecnología al país norteamericano. En efecto, los estadounidenses solo mantienen un amplio liderazgo, en los sectores compuestos por la industria automotriz y la aeronáutica, entre los nueve rubros analizados.
Al mismo tiempo, Estados Unidos se convirtió en un importador masivo de productos tecnológicos hechos en China. Agrega el estudio que, a pesar de que hace una década Estados Unidos exportaba tres veces más que China en productos tecnológicos a los mercados mundiales, la situación cambio radicalmente a partir del 2010.
Desde entonces, China asumió el liderazgo de las exportaciones, superándolo por amplia ventaja, en renglones como maquinaria eléctrica, equipos de telecomunicaciones y sonido, equipos de oficina y máquinas industriales. Asimismo, acaba de igualar las ventas de instrumentación cientÃfica y está cerca de emparejar las ventas de plantas de generación de energía.
AUTOMÓVILES Y AVIONES, FORTALEZA ESTADOUNIDENSE
El mismo estudio evidencia que EE. UU. supera a China en máquinas especializadas, y domina en la industria de automóviles y aviones. En exportaciones de manufacturas industriales, China logró un valor total, de US$ 484.000 millones, en el primer trimestre; EE. UU., con US$ 299.000 millones, cifra similar a la del mismo periodo del 2012. En lo que respecta a los 9 sectores de alta tecnología, China vendió US$ 261.000 millones y EE. UU. US$ 164.500 millones.