La compañía precisó en un comunicado que el proyecto abarca la protección de la Reserva de la Biosfera Maya, el complejo forestal más importante de América Central.
Según la entidad, el sistema de vigilancia permitirá a las autoridades guatemaltecas «identificar y combatir focos de deforestación, incendios, ocupación ilegal y desarrollo de actividades ilícitas como explotación ilegal de recursos naturales en un área superior a 21 mil kilómetros cuadrados».
El acuerdo prevé la adquisición por parte de las autoridades guatemaltecas de seis aviones A-29 Súper Tucano, aparatos turbohélice diseñados para ejecutar misiones de ataque aéreo ligero, vigilancia, interceptación aérea y antiinsurgencia.
Además, el contrato prevé la adquisición de un sistema de mando y control de tres radares primarios tridimensionales, la prestación de apoyo logístico a operaciones aéreas y el entrenamiento a pilotos y mecánicos.
Guatemala se convierte tras el cierre del acuerdo en el sexto operador del modelo Súper Tucano en América Latina junto a Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y República Dominicana.