La aerolínea finlandesa Finnair anunció hoy que en el primer trimestre del año perdió 28,1 millones de euros, un 79 % más en términos interanuales, por la caída de la demanda de viajes vacacionales y la fortaleza del euro.
El director ejecutivo de Finnair, Pekka Vauramo, destacó como causa de estas cifras «un ligero descenso de la capacidad total», la «fuerte contracción del volumen de tráfico vacacional», las «fluctuaciones del tipo de cambio» con respecto a divisas asiáticas, la debilidad del mercado interno y la «sobrecapacidad» que lastra al transporte de mercancías.
El resultado, agregó Vauramo, es «muy débil», por lo que el programa de reducción de costes en marcha y la nueva estrategia comercial de la compañía son «absolutamente esenciales».
«Proseguir con las medidas de reducción de costes es inevitable y vital para el futuro de Finnair», agregó en un comunicado.
Vauramo lamentó no haber podido llegar a un acuerdo aún con el colectivo de pilotos para reducir costes laborales e insinuó que de no alcanzarlo la empresa podría recurrir a despidos.
La pérdida neta de explotación en los tres primeros meses del ejercicio se situó en los 34,2 millones de euros, casi el doble de los 17,5 millones de pérdida registrados en el período de comparación.
La facturación de la aerolínea finesa ascendió a 543,3 millones de euros, lo que supone una caída del 8,4 % con respecto al primer trimestre del año pasado.
El número de pasajeros transportados por Finnair entre enero y marzo alcanzó los 2,214 millones, un incremento del 2,5 % con respecto al mismo período del ejercicio previo.
El director ejecutivo de la compañía aérea mantuvo pese al mal arranque sus previsiones para el conjunto del año, en el que espera una facturación similar a la del año pasado…