El florecimiento de la actividad turística fue confirmado por Juan Pablo Nieto, jefe de la unidad de Desarrollo del Producto, del Inguat, en reciente comparecencia ante la Comisión de Turismo del Congreso de la República.
Sin embargo, ese crecimiento y desarrollo en el sector turístico no ha representado un aumento sustancial en las arcas nacionales, vía el impuesto hotelero que recauda el Inguat.
La causa es que Guatemala se encuentra a merced de la buena voluntad de las empresas hoteleras y de operadores turísticos, cuyas ventas de servicios en línea no siempre son reportadas al fisco, ni extienden factura a los usuarios o consumidores.
Los omisos aprovechan la falta de capacidad del Inguat para llevar el control del impuesto, que debería recibir por estas transacciones.
Lo anterior es confirmado por el director del instituto, Jorge Mario Chajón, quien señala que esta entidad, a pesar de ser rectora de la actividad turística, no tiene ningún control ni auditoría sobre las negociaciones o ventas que tanto los hoteles como los operadores de turismo hacen en línea.
Según explicó el funcionario, el Inguat no tiene la capacidad de ejercer ese control y eso es aprovechado, en muchas ocasiones, por empresas hoteleras que tienen la infraestructura y los mecanismos para realizar ventas en línea.
Se trata no solo de venta de servicios de hospedaje sino también de otros conexos, incluyendo paquetes turísticos, sin que estas transacciones sean reportadas ni a la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) ni al Inguat, como corresponde, pues según la ley esta entidad es la encargada de recolectar el impuesto al turismo.
Chajón indica que el control en línea no está legislado y que esto podría ser evasión, si se da el caso de que los hoteles cobren los impuestos al turista.
Si así fuera, lo correcto sería que las empresas, hoteles u operadoras turísticas, no solamente recauden sino también declaren y trasladen lo captado al fisco, pero esto queda librado a la voluntad de las mismas empresas, ante la falta de controles gubernamentales.
SIN INFORMACIÓN NI CONTROLES
En una tabla que desglosa lo recaudado por concepto del 10% sobre hospedaje, de los años 2008 a 2015, proporcionada a Siglo.21 por el departamento Financiero del Inguat, se corrobora que esta recaudación se realiza cuando los pagos se hacen in situ y son facturados, así como susceptibles de ser auditados.
Es decir, quedan excluidos los pagos en línea. Es más, según algunos usuarios de estos servicios, los turistas que pagan de esta forma y visitan nuestro país, no siempre reciben factura contable por los servicios contratados. En su lugar, muchas veces, se les extiende un recibo no contable, carente de validez para la declaración de impuestos de los usuarios…