La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés) y la alianza oneworld se han unido para trabajar juntas en el campo del cálculo de emisiones de CO2. Gracias a la colaboración de las 13 aerolíneas miembros de oneworld, la precisión y la calidad de CO2 Connect de IATA mejorará aún más al contar con un mayor número de datos de consumo de combustible proporcionado por cada aerolínea: Alaska Airlines, American Airlines, British Airways, Cathay Pacific, Finnair, Iberia, Japan Airlines, Malaysia Airlines, Qatar Airways, Qantas, Royal Air Maroc, Royal Jordanian y SriLankan Airlines.
La vicepresidenta sénior de Sostenibilidad y economista jefe de IATA, Marie Owens Thomsen, ha
afirmado que «los viajeros quieren tomar decisiones informadas sobre su huella de CO2, y IATA quiere
contribuir con su calculadora CO2 Connect en el cálculo de emisiones de CO2 basado en datos
operativos. Nos complace que oneworld se convierta en la primera alianza de aerolíneas que se suma a
esta iniciativa. Esta decisión subraya la importancia del objetivo de la industria de alcanzar coherencia y
armonización en esta materia».
Grace Cheung, presidenta del Consejo de Medio Ambiente y Sostenibilidad de oneworld y directora de
Sostenibilidad y Responsabilidad Corporativa del Grupo Cathay Pacific, ha declarado que «oneworld se
enorgullece de ser la primera alianza mundial de aerolíneas que apoya el trabajo de IATA para
proporcionar a los clientes estimaciones de alta calidad sobre las emisiones de CO2 de sus vuelos.
Nuestra colaboración con IATA en CO2 Connect ayudará a su vez a los actores clave de todo el sector
de la aviación, como aerolíneas, fabricantes de aeronaves y empresas de gestión de viajes, entre otros,
a tomar decisiones mejores y más informadas para los viajeros y a mejorar los informes ESG”.
IATA lanzó CO2 Connect en junio de 2022, con el objetivo de utilizar los datos de las aerolíneas
miembros, como el consumo de combustible, la carga en bodega y los factores de ocupación, para
proporcionar cálculos de alta calidad de las emisiones de CO2 por vuelo de pasajeros. En combinación
con datos procedentes de IATA y del mercado abierto de datos, CO2 Connect calcula las emisiones de
CO2 de 74 tipos de aeronaves, que representan aproximadamente el 98% de la flota mundial de
pasajeros operativa, y examina los datos de tráfico de 881 operadores aéreos que representan
alrededor del 93% de los viajes aéreos mundiales.
Los cálculos de datos de CO2 Connect están disponibles para los socios del sector a través de una API
o un archivo plano, así como a través de los canales de venta de las aerolíneas y las empresas de
gestión de viajes.
En un sondeo reciente*, el 90% de los encuestados afirmó que los viajeros tienen la responsabilidad de
conocer las emisiones de carbono de su vuelo, pero solo dos de cada cinco lo hacen realmente. Y
aunque el 84% de los encuestados reconoce que es fácil encontrar herramientas para calcular con
precisión sus emisiones de carbono, la gran mayoría (90%) espera que las aerolíneas o las agencias de
viajes les faciliten esta información, lo que indica la confianza en la industria para que esta proporcione a
los pasajeros información anticipada sobre el impacto del carbono de sus vuelos.
CO2 Connect de IATA continúa evolucionando e incluyendo nuevas funciones. Actualmente acaba de
lanzar una herramienta para informar a las empresas sobre las emisiones de CO2 de los viajes de
negocios, y el año que viene introducirá soluciones de compensación de CO2 para ayudar a las
aerolíneas y a otros socios de la industria. También se está desarrollando una calculadora de carga, que
se lanzará en 2024, para que expedidores y transitarios puedan acceder a datos precisos sobre
emisiones de CO2 a partir de datos reales de las aerolíneas.
Metodología
CO2 Connect utiliza la metodología de cálculo de CO2 por pasajero (RP 1726) adoptada en la
Conferencia de servicios a los pasajeros de IATA en marzo de 2022. Esta fue concebida en colaboración
con líderes de 20 aerolíneas miembros y los principales fabricantes de aeronaves, así como con el
asesoramiento de organismos reguladores internacionales y proveedores logísticos. La metodología
incluye factores como:
• Directrices sobre la medición del combustible, en consonancia con el Plan de compensación y
reducción de carbono para la aviación internacional (CORSIA).
• Un marco bien definido para el cálculo de emisiones de CO2 en relación a las actividades aéreas
de las aerolíneas.
• Directrices sobre emisiones distintas al CO2 y el forzamiento radiativo (RFI, por sus siglas en
inglés).
• Principio de cálculo basado en el peso: atribución de las emisiones de CO2 por pasajero y carga
en bodega.
• Directrices sobre el peso de los pasajeros, mediante el peso real y el peso estándar.
• Factor de emisiones para la conversión del consumo de combustible de aviación en CO2, en
línea con CORSIA.
• Ponderación y multiplicadores que reflejan las distintas configuraciones de cabina de las
aerolíneas.
• Directrices sobre compensación de carbono y combustibles sostenibles de aviación (SAF, por
sus siglas en inglés) como parte del cálculo de emisiones de CO2.