Ha sido durante muchos años un mercado de acceso y comercio restringido, pero en la actualidad en la República Islámica de Irán, la gama de servicios aéreos y su capacidad de operación hacia el resto del mundo, se han incrementado significativamente.
En 1996, había 105 pares de ciudades operadas desde Irán al resto del mundo; En 2015 ese número se ha duplicado hasta 236, siendo cerca de 130 de éstos, servicios internacionales. A pesar de varias sanciones, Irán ha experimentado una mayor actividad en los servicios aéreos.
En un futuro, puede que en Irán los resultados políticos desencadenen algunos cambios en su mercado de la aviación. Si es así, ¿Cuáles podrían ser esos cambios? Existe una demanda de nuevos aviones de consumo más eficiente de las aerolíneas regionales y si se lo permiten, es probable que hagan un pedido a uno de los principales fabricantes de aviones. Sin embargo, la entrega real de las flotas podría tardar en realizarse, dadas las actuales reservas de los fabricantes y sus franjas horarias de entrega.
Desde el punto de vista de la demanda, cualquier cambio en las oportunidades comerciales y en los viajeros, aumentará las posibilidades. Con las aerolíneas de bajo coste, actualmente representando menos del 3% de la capacidad, frente a un promedio regional cercano al 17%, sugiere que el paisaje de la aviación puede cambiar.
Si a eso le sumamos la ubicación geográfica de Teherán y su población residente, de una magnitud similar a la de grandes ciudades como Londres o Nueva York, o si tiene lugar un mayor progreso político, el mercado de la aviación de Irán puede experimentar un gran cambio.