Los restos de varias de las 224 personas que murieron a bordo del avión de pasajeros ruso que se estrelló en Egipto durante el fin de semana han regresado a San Petersburgo, pero la incertidumbre aún gira en torno a qué causó este desastre.
Un funcionario principal de la aviación rusa ha dicho que el vuelo 9268 de Kolavia se desintegró en el aire antes de que tocara tierra en un área remota de la intranquila península del SinaÃ, en Egipto, el sábado.
Satélites estadounidenses detectaron «actividad infrarroja» sobre la Península de Sinaà al momento en que ocurrió el incidente del vuelo 9268, dijo un funcionario estadounidense familiarizado con la última información.
La comunidad de inteligencia y militar de Estados Unidos está revisando esa información e intenta determinar qué significa.
Parte del análisis es para determinar dónde ocurrió la actividad, si en tierra o en el aire, y qué es lo que esto puede decir sobre lo que le pudo pasarle al avión.
Las autoridades le han restado importancia a un aparente rumor de que los militantes islámicos en Sinaà derribaron el Airbus A321-200, ya que dijeron que la razón más probable del accidente es un fallo técnico.
Sin embargo, hasta el momento, no han podido ofrecer una explicación definitiva de lo que sucedió y el presidente egipcio sugiere que las investigaciones podrían tardar meses…