Hace 27 años, Michimasa Fujino entró a un hangar en Mississippi para trabajar en la parte de aviación de Honda Motor Co. Al año siguiente, Fujino, quien ahora preside la unidad de aeronaves, dice que el proyecto finalmente logrará despegar.
Si esto es realmente así, la tokiota Honda sería la primera recién llegada en recibir desde 2006 la autorización de Estados Unidos en el mercado de jets empresariales que es de $21,000 millones. Eso enfrentaría a la automotriz con los líderes del mercado: Cessna de Textron Inc. y la brasileña Embraer S.A., que lograron sacarle el cuerpo a las amenazas provenientes de empresas como Eclipse Aviation, de Bill Gates, que solicitó el amparo del concurso hace cinco años.
Pese a que el Honda Jet aún no salió a la venta, Fujino dijo que tenía dos o tres años de pedidos del avión de $4.5 millones y dio señales de que la empresa será rentable antes de que finalice el decenio. Dijo que el avión de siete butacas, que Fujino denomina "auto deportivo volador" o "el Acura de los aire" iba a ser un 15% más eficaz en lo que respecta al consumo de combustible, tener una cabina más espaciosa y volar un 10% más rápido que las naves comparables.
"No hay recién llegados a la industria de la aviación; solo anécdotas de advertencia", dijo George Tsopeis, vicepresidente de la montrealesa Zenith Jet que es una empresa de asesoría en aviación. "Si Honda consigue meter el Honda Jet en el mercado, solamente eso sería un enorme logro".
Con unos lentes de aviador indicados por un oftalmólogo bien calzados, Fujino dijo que esperaba que el jet de diseño tan poco convencional (los motores están sobre las alas) consiga el permiso de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (en inglés, FAA) para el próximo año.
Ya lo había dicho antes. Todos los años, Honda demora el debut del avión desde que puso metas de entregas en 2010, que obedecen a razones que van desde las dificultades para conseguir componentes hasta los daños que generan las heladas. La empresa dice que está cada vez más cerca, puesto que en mayo anunció que el quinto Honda Jet que presentaba conforme a los requisitos de la FAA había logrado hacer su primer vuelo entero.
A fin de conseguir la habilitación de la FAA, el fabricante tiene que demostrar que el avión satisface los requisitos reglamentarios de Estados Unidos para absolutamente todo: desde la fortaleza de las alas hasta el modo como aterriza con viento lateral. La mayor parte del proceso se realiza a puertas cerradas, porque los datos de testeo y los diseños que proveen los fabricantes de la aeronave se consideran protegidos por la propiedad industrial y tienen carácter confidencial.