Durante el primer trimestre del año, las empresas del sector turístico que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) –conformadas por aerolíneas, grupos aeroportuarios y operadores hoteleros, entre otras– registraron una pérdida de 109,842 millones de pesos en valor de mercado al cierre de septiembre, una caída de 29% respecto a finales de 2019, que prácticamente ha permanecido para las empresas de esta categoría desde hace unos meses.
Pero algunas emisoras han tenido una recuperación más acelerada que otras, como Volaris, que ya ha recuperado 84% del valor bursátil que tenía antes de la pandemia. “La falta de capital de otras aerolíneas, las menores rutas y frecuencias, le ha dado una ventaja a Volaris, y aunque el tamaño del mercado hoy es más chico de lo que era hace un año, ha ganado market share”, explica Alejandra Marcos, analista de Intercam.
La apuesta por el mercado local es otro factor que ha jugado a favor de la aerolínea low-cost, en medio de la lenta recuperación del segmento internacional. Para Volaris los pasajeros extranjeros representaron 18% del total durante 2019, mientras que para la otra aerolínea que también cotizan en Bolsa, como Aeroméxico, esta proporción fue de 37%, en el mismo periodo.
“Aeroméxico, además de la caída del segmento internacional, había tenido un retraso en el pago de sus deudas, y la pandemia la dejó muy muy debilitada en términos de liquidez”, explica Julián Fernández, analista de Bursamétrica.
Esto ha alentado la recuperación del valor bursátil de la aerolínea, que ahora equivale al 28% del que tenía antes de la pandemia del coronavirus.
Los analistas prevén que conforme la aerolínea recupere su participación en el mercado y su liquidez, mejorará su valor bursátil. En semanas pasadas, Aeroméxico recibió la aprobación de sus accionistas para inyectar 3,500 millones de pesos a sus operaciones a través de emisiones de deuda y capital, que además de fortalecer su posición de liquidez, también servirán para que la aerolínea pueda expandir su flota y rutas.
Respecto a los grupos aeroportuarios, la menor presión de costos fijos –como el caso de las aerolíneas– ha jugado a su favor, aunado a la expectativa de que podrán renegociar las inversiones que tenían contempladas obteniendo una mayor disponibilidad de efectivo. Este es el caso de GAP, que ha recuperado 79% de su valor de mercado pre COVID-19, favorecido por la extensión sus inversiones de capital desde un periodo de cinco a siete años…