TURISMO

Brasil vuelve a ser la meca del turismo argentino

La combinación de retraso cambiario del peso frente al dólar, la posibilidad de pagar en 12 cuotas sin interés y un real cada vez más devaluado prometen convertirse en la fórmula perfecta para los turistas argentinos que por estas horas están definiendo el lugar de sus próximas vacaciones.

Si bien en la industria explican que las elecciones agregaron este año un factor de incertidumbre adicional, también destacan que la plaza brasileña ya se perfila como la gran ganadora del verano 2015/16.

«Hace 12 semanas los paquetes y aéreos a Brasil representaban el 10% de nuestras ventas y hoy llegan al 20%, en un contexto de crecimiento de todos los viajes internacionales. Brasil, además, está ganando participación a otros destinos tradicionalmente buscados por los argentinos. Hoy un paquete con aéreo incluido y en base doble a Salvador de Bahía se consigue a 15.000 o 16.000 pesos contra los 23.000 o 24.000 que cuesta viajar al Caribe», afirma Marcelo Grether, director comercial de la agencia de viajes Avantrip.

Grether precisa que el interés en alza de los argentinos por Brasil no es nuevo, pero reconoce que a medida que se profundiza la caída de la cotización del real crece la demanda de los turistas argentinos.

El viernes pasado la moneda brasileña retrocedió otro 0,7% hasta tocar los 3,87 reales por dólar y ya se acerca a la barrera psicológica de los 4 reales, aunque ayer, al conocerse el nuevo ajuste que aplicará el gobierno de Dilma Rousseff, se revaluó a 3,81 reales por dólar.

«Hace tres meses se notó el primer repunte en la demanda gracias a que los pasajes aéreos a Brasil se volvieron más competitivos. Lo que pasó es que la salida de brasileños al exterior cayó muy fuerte, lo que se tradujo en una polí­tica mucho más agresiva de las aerolíneas para llenar los asientos que dejaron de comprar los turistas paulistas o cariocas. Hoy es posible encontrar vuelos a Río por 2500 pesos, es decir, más baratos que ir a Córdoba», explica el director de Avantrip.

«Brasil se tornó un destino casi imbatible porque ofrece no sólo una moneda devaluada sino también la posibilidad de comprar los pasajes al dólar oficial y en cuotas», coincide Arturo García Rosa, presidente de la consultora especializada en turismo y hotelería RHC. En el sector además destacan que el efecto real devaluado se vio potenciado por una mayor predisposición de los argentinos a viajar al exterior, en un contexto generalizado de pérdida de competitividad del peso ante las monedas de los países vecinos.

«El que tiene algo de plata hoy está intentando viajar afuera, pero en el caso puntual de Brasil, al retraso cambiario del peso se suma la depreciación del real. En un año, el dólar en Brasil saltó de 2,80 a 3,80 reales, y a diferencia de lo que ocurre en la Argentina, no hay un traslado tan directo de la devaluación a los precios locales, lo que torna aun más atractivo a los destinos brasileños», explica el economista Camilo Tiscornia…

Compartir noticia:
ANUNCIOS
SÍGUENOS
Biblioteca Virtual